Randy Pausch, una pila de vida

El año pasado Randy Pausch fue invitado por la Universidad de Carnegie Mellon a dar una clase magistral para un auditorio de 300 personas. La conferencia se convertiría en un verdaderode la industria editorial mundial, en tanto de allí nació el libro "La última lección".

Murió hace dos días, a causa del cáncer de hígado que padecía desde septiembre pasado, cuando ofreció aquella charla. Tenía 47 años, mujer y tres hijos. Anne Watzman, vocero de la universidad, dijo que Pausch había muerto en su casa de Virginia.

Su popular última lección en el auditorio de Carnegie Mellon en septiembre del año pasado atrajo la atención internacional y fue vista por millones de personas desde Internet. En ella, Pausch celebraba la vida con la que siempre soñó. Llamó al auditorio a cumplir los sueños de la infancia y a divertirse hasta el último minuto. "Me estoy muriendo, pero me estoy divirtiendo", decía.

Días antes de esta charla, a Pausch le diagnosticaron un cáncer terminal con una esperanza de vida de pocos meses. La clase magistral se transformó, para sorpresa de los presentes, en una increíble lección de vida en la que Randy rescató los sueños de la infancia, instó a que vivamos cada día como si fuera el último, a divertirnos hasta último momento y a elegir cómo jugar con las cartas que nos tocaron en suerte. El video de esa conferencia explotó en Internet: en menos de un mes más de 6.000.000 de personas habían revivido la charla de Randy.

Desde su lanzamiento ocupa los primeros puestos de las listas de best seller en Estados Unidos. Ya fue publicado en 32 países y lleva vendidos 4.500.000 de ejemplares. En Argentina está en librerías desde el 16 de julio pasado.

Video de la charla de Pausch: