Qué se dijo en la convención de Telefónica Latinoamérica

Telefónica aspira a incorporar unos 50 millones de nuevos accesos en América Latina en los próximos tres años. Lo confirmó José María Álvarez-Pallete, presidente de Telefónica Latinoamérica, al exponer los desafíos para la región. El consejero delegado de Telefónica, Julio Linares, subrayó que América Latina es “el primer contribuyente” para convertir a Telefónica en la mejor compañía global de comunicaciones del mundo digital.

Telefónica, con su presidente César Alierta a la cabeza, reunió en México a los principales directivos de Telefónica Latinoamérica para compartir los retos en los próximos tres años, en el marco del programa estratégico bravo!.

Durante su intervención en la clausura de la 4ª Convención de Directivos de Telefónica Latinoamérica, Alierta explicó que pese a la severa recesión vivida, “hemos cumplido nuestros compromisos, con Latinoamérica como principal motor”, para después hacer hincapié en que “lo peor de la recesión ya ha pasado y el futuro se llama crecimiento. En el nuevo entorno digital, para crecer y transformarnos responsablemente, hemos lanzado bravo!, para convertirnos en la mejor compañía global de telecomunicaciones del mundo digital. Y el papel y modelo de América Latina es clave para alcanzar el éxito de este programa”.

José María Álvarez-Pallete, presidente de Telefónica Latinoamérica, desglosó en la Convención los desafíos de bravo! en la Región. Aspiran a incorporar, en los próximos tres años, aproximadamente 50 millones de accesos adicionales, entusiasmar a los clientes hasta alcanzar los mayores índices de satisfacción del sector y suministrar una oferta integral con todo tipo de servicios, de forma competitiva y eficiente.

El presidente de Telefónica Latinoamérica lo tiene claro: “Estamos en una región de alto crecimiento, nuestra industria tiene recorrido en la Región y los nuevos negocios van a explotar, con más crecimiento, más intensidad y más usos”, señaló. Latinoamérica es una de las regiones que, junto a Asia, está liderando la recuperación, gracias a la estabilización macroeconómica y los cambios estructurales que ha afrontado durante la última década.