Tres autores mendocinos en antología mexicana
Publicado en Diario Los Andes, sábado 21 de marzo 2009
Tres autores mendocinos en antología mexicana
Alejandro Frías, Mariana Guzzante y Mauricio Runno fueron invitados a participar de una antología organizada por Café Literario de México y premiados con la publicación.
Tres autores mendocinos en antología mexicana
Alejandro Frías, Mariana Guzzante y Mauricio Runno fueron invitados a participar de una antología organizada por Café Literario de México y premiados con la publicación.
La convocatoria se hizo con el tema 'El amor en cada esquina', a través del relato y la poesía y el libro fue presentado el mes pasado en el Palacio de Bellas Artes del Distrito Federal de ciudad de México. Los organizadores, con muy buen criterio, apoyan el trabajo de los escritores menos conocidos, debido a las dificultades económicas para acceder al libro.
La editora, Guadalupe Bucio Gaona, hizo hincapié en la necesidad de la crítica de los autores para poder crecer y así ponderó las palabras de Héctor Carreto en la sala Adamo Boari del Palacio de Bellas Artes, durante la presentación, que reproducimos a continuación.
"Durante la segunda década de los años setenta, los entonces jóvenes escritores estábamos haciendo revistas literarias y éramos conocidos por formar parte de alguna: Xilote, Caballo verde, Rilma, Cuadernos de literatura, El Zaguán, Versus, Manifiesto Infra, El Telar, El oso hormiguero, Signos y Zona eran algunas de las más conocidas. Por supuesto, también estaban los editores independientes de plaquettes, como La máquina de escribir y La máquina eléctrica. Y eran los tiempos de esplendor de los suplementos culturales, desde La cultura en México, de la entonces muy leída revista Siempre, hasta el Diorama de la cultura de Excélsior, pasando por la Revista de la Universidad y la Semana de Bellas Artes.
“Había espacio suficiente para que todos publicáramos. Volviendo al caso de las revistas, les comento que incluso los encuentros literarios se empezaron a diseñar en torno de ellas: el primer maratón de poesía, organizado, creo por el INBA y por la UNAM en 1979, en el Museo de Arte Carrillo Gil, alternaba la lectura de los poetas reconocidos (Gutiérrez Vega, Montes de Oca, Tomás Segovia) con las revistas de jóvenes.
"La crisis económica fue minando no únicamente las publicaciones independientes sino, también, de los suplementos culturales de algunos periódicos. Por fortuna, la llegada de la era digital está dando la oportunidad al editor independiente y a muchos autores para hacer conocer nuevas propuestas literarias. Falta, creo, solucionar los aspectos publicitarios y de distribución. Aunque la difusión, mediante el correo electrónico, parece estar supliendo dignamente estos aspectos. Además, está el camino de las ediciones electrónicas, tanto de revistas como de suplementos y de libros.
Tallereando textos "Café Literario Editores es un magnífico ejemplo de amigos escritores que se reúnen para tallerear sus textos, para luego verlos publicados en las propias ediciones que ellos diseñan, imprimen y divulgan. "Títulos que resultan altamente atractivos de inmediato cuando el cliente en potencia los tiene enfrente: bien diseñados y visualmente agresivos y con títulos tan sugerentes como 'Cupido negro', cuentos de amor y desdicha; 'Homenaje a Bukowski', antología de borrachos, y el que ahora nos concierne: 'El amor en cada esquina', antología que incluye relatos y poemas de autores de los que, salvo Marlene Diveinz, desconocemos las edades, ya que omiten ese dato en sus fichas de pie de página. Eso me parece atinado, pues evita en el lector las feas comparaciones entre autores de diferentes generaciones y propicia el goce la lectura sin ese tipo de prejuicios.
"Como suele ocurrir en una reunión de autores, los estilos son muy diversos, lo que en vez de demeritar enriquece las posibilidades de lectura. La unidad está en el asunto: el encuentro fortuito entre dos, en una esquina, en una fiesta, en un "pueblo chato y feo", como escribe Mariana Guzzante al principio de un relato, o en un mercado o en una librería, o en cualquier lugar público, donde todos estamos expuestos a la mirada de los otros. "Tal es el caso de la mujer de los pantalones negros ajustados, quien primero se siente acosada por la mirada de un sujeto que le gusta, para después intercambiar señales con los ojos y terminar con el intercambio de manos y fluidos en el cuento "Tablero", de Guadalupe Bucio Gaona. "De hecho, todo el cuento es un juego tenso e intenso, donde un descuido puede ocasionar desventajas; es un ajedrez donde, finalmente, ganan los dos contrincantes. Frases largas de Frías
"Hay textos que me llaman la atención por las frases de tirada larga, como "Ébano", de Alejandro Frías, y en donde la velocidad va creciendo muy rápido en la medida en que los personajes se van acercando. El texto es un intercambio en todo sentido: un puesto de libros en un mercado, las miradas, las palabras y el jaloneo. "En el texto de Esteban Raymundo González, "Japón", aprecio la fina sutileza de su factura: nos omite algunos datos, que nos deja para que nosotros los completemos. Por ejemplo, omite decirnos qué edad tienen los personajes y, mientras leemos el relato, advertimos que no importa, porque el diálogo nos va develando que uno es mucho mayor que el otro. Por cierto, sabemos menos cosas del que narra que del otro.
"Muy inquietante me resulta el cuento "Los pies que jamás vi", de Luis Felipe Pacheco, pues culturalmente estamos acostumbrados a excitarnos con los pies de las mujeres, pero la situación se presta, pues usan sandalias y la mayoría del calzado femenino muestra, por lo menos, la mitad del pie. No ocurre lo mismo con el pie masculino cuya moda desde hace siglos lo condena a la oscuridad de la bota o del zapato muy cerrado, además del calcetín que refuerza la cubierta. En este sentido, ha de ser sumamente mortificante, y frustrante, para quien el pie masculino sea ese "oscuro objeto del deseo".
Esta angustia la expresa muy bien Pacheco, mediante un tono de humor negro muy bien utilizado. Angustia y deseo, tragedia y sensualidad, además de muy buen ritmo, son los componentes de esta pieza. "La contraparte de este autor la dan los tres cuentos de Enrique Layna, "Calentura", "La espera" y "Sorpresas". En los tres casos, la figura de la mujer es tan sexi que de inmediato nos enciende: la mujer es una pantera cuya única prenda son prácticamente los zapatos de tacón. Layna es un cuentista en el más amplio sentido de la palabra, ya que nos va llevando de un lugar a otro, a su gusto, para rematarnos con finales sorpresa muy bien logrados.
"Y bueno, qué decir de Arturo Arredondo, maestro de la narrativa desde hace muchos años, y que con "Román y Estrella" nos obsequia un cuento al mismo tiempo áspero y tierno, de una realidad cruda que alterna con la suavidad de lo íntimo; relato que nos da esperanzas para que consigamos una reconciliación con la vida, sólo para recordarnos que el Destino mayor es el personaje de la Tragedia. Poemas "Sobre los poemas presentados por Marlene Diveinz y por Guillermo Rojo Córdova diré que, más que el resultado, lo que me entusiasma de ellos es su búsqueda expresiva, su experimentación, su osadía para encontrar nuevos caminos poéticos.
"En fin, todos estos textos comparten lo excitante que puede resultar un encuentro fortuito, al azar, actuando sin pensarlo, de inmediato, sin medir las consecuencias. En eso transgreden lo convencional, las buenas costumbres, pero, como dijo aquel filósofo de barrio, "vida sólo hay una, y hay que aprovecharla, porque mañana… "
"Quisiera comentar los relatos restantes, pero mejor los invito a leerlos, a gozarlos, y felicito mucho a los integrantes del Café Literario por el esfuerzo y por los grandes logros que están teniendo". AC
Comentarios
Un beso
Gabi Belvedere