El primer Centro de Capacitación e Investigación de Té en América
ICAT, Irimi Centro Argentino de Té, reúne a todos tea blenders, proveedores y los amantes de la cultura milenaria del té. El espacio está definido por el estilo y la majestuosidad en línea con la delicadeza del té. Y se trata del primer centro educativo y de investigación para difundir su curso de “Especialista en Té”, la cultura milenaria del té, rica en leyendas y tradiciones originadas a partir del nacimiento de esta infusión en China, hace 5000 años.
La propuesta es aprender la historia, la geografía, la elaboración, la técnica de cata del té (que es diferente a la de las demás bebidas) y degustar todos los tipos de té del mundo. Los alumnos podrán descubrir los distintos sabores, sus maridajes, su análisis sensorial, el protocolo y ceremonial así como la historia de las culturas de los países productores. El conocimiento de estas culturas hará posible transportar los sentidos al maravilloso mundo del té, sinónimo de refinamiento, espiritualidad y placer.
La especialización está dirigida por un equipo multidisciplinario de profesionales de distintas formaciones como Irmi Marchetta, la única Tea Eclectic Blender en América (denominación otorgada por su maestro tealero tibetano), Silvia Ramos de Barton, Sommelier con título Nacional e Internacional, especialista en enología y Ceremonial y Protocolo, Pedro Alperowicz, licenciado en Admistración y Diplomado en Alimentos y Bebidas, con especialización en Té, y Horacio Bustos, Especialista en Antropología Vitivinícola, y sommelier especializado en vino, té, agua, aceites y vinagre.
La currícula consta de más de 60 clases para el curso de "Especialista en Té" que comienza a dictarse en el mes de mayo. En la misma, no sólo incluyen la cata de té de distintos países y tea blenders, sino también geografía, historia, religión, idioma, ceremonias, protocolo, análisis sensorial, entre otras. La idea es que el alumno se transporte a los países productores de manera virtual, a través de proyecciones, y comprenda no sólo el té sino la cultura de cada país productor y consumidor.
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